Pero no murió de sobredosis, por un coma etílico, o por culpa de un cigarrillo mal apagado; ni a causa de cualquier otra broma macabra provocada por sus excesos y adicciones (que no eran pocas). No murió escabrosamente joven. Ni siquiera fue una muerte autoinfligida al estar cansada del spleen, o insatisfacción vital. Carson McCullers murió tras varios meses enferma e inválida, debilitada por los fuertes dolores y en una cama de hospital al lado de su marido. Siempre tuvo muy mala salud, y murió tras varios ataques cerebrales y un cáncer de mama. Su muerte fue tan inadecuada, tan impropia de una literata de su calibre, tan normal, anodina y poco inspiradora, que al único al que logró inspirar fue al prolífico Hank, más conocido como Charles Bukowski. Este, un gran admirador de Carson, decidió reescribir esa nota discordante que fue su muerte, tornándola más atractiva y acorde con ella. Ideó una muerte tan idílica que podría introducirse en cualquier libro de la escritora con facilidad sin que desentonase.
Esa muerte es la que traigo. Se puede escuchar en inglés, en español, o los dos.
Esa muerte es la que traigo. Se puede escuchar en inglés, en español, o los dos.
Carson McCullers by Charles Bukowski
She died of alcoholism
wrapped in a blanket
on a deck chair
on an ocean
steamer.
All her books of
terrified loneliness
all her books about
the cruelty
of loveless love
were all that was left
of her.
As the strolling vacationer
discovered her body
notified the captain
and she was quickly dispatched
to somewhere else
on the ship
as everything
continued just
as
she had written it.
wrapped in a blanket
on a deck chair
on an ocean
steamer.
All her books of
terrified loneliness
all her books about
the cruelty
of loveless love
were all that was left
of her.
As the strolling vacationer
discovered her body
notified the captain
and she was quickly dispatched
to somewhere else
on the ship
as everything
continued just
as
she had written it.
Carson McCullers de Charles Bukowski
Ella murió
de alcoholismo
envuelta en una manta
en una tumbona
en un barco
de vapor.
Todos sus libros
sobre la soledad aterrada,
todos sus libros
sobre la crueldad
del amor sin amor,
fueron todo lo que quedó
de ella.
Cuando el turista paseante
descubrió su cuerpo,
se lo notificó al capitán
y ella fue
rápidamente despachada
a cualquier otra parte
del barco
y todo
continuó justo
como
ella lo había escrito.
PD: Con un resfriado del copón se recita mejor.
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