Los Juegos del Hambre

Sí, los dibujos los he hecho yo. Y sí, ya sé que se
ven fatal, pero qué quieres.

¡Y aquí está (por fin) la reseña de los Juegos del Hambre! Reseña que llevaba días persiguiéndome y que aquí os traigo. Perdonad mi tardanza en escribir, pero eh, tengo escusa: estaba enferma, muriéndome (sí, yo soy así de dramática). Pero tranquilos, que ya he resucitado.

Este libro llegó a mí gracias a Arizona (ni se te ocurra pinchar aquí), que me obligó a leerlo (sí, nosotras nos obligamos a leer libros mutuamente).

Bueno, que os voy a decir del libro que no os hayan dicho antes. El libro es genial (ahora Arizona soltaría un:"¡Te lo dije!) Y es que eso de un juego en el que sueltan a un grupo de personas en un bosque es la HOSTIA.

Es un argumento tan sádico, tan macabro, tan...como yo. Si hay algo más divertido que ahogar Sims es matar personajes. Es un libro lleno de acción y completamente adictivo. Estos libros no me los leí, me los tragué, y la verdad, me supo a gloria.  Si todavía no lo has leído no te lo leas en esta entrada intentaré convencerte de que lo hagas.

Y es que Katniss me encanta, cómo no. Es fuerte, sarcástica, salvaje, superviviente y con una mala leche increíble. Vamos, mi prototipo de personaje ideal.

Peeta...ains. Sí, la escritora muy original ella para poner nombres, no como otros *ejem* ¿¿Reneesme?? *ejem*. Que ya que pone nombres raros, lo hace a lo grande, aquí pringamos todos, y así nadie se ríe de nadie en el colegio (yo me imagino a un guardia en la puerta de Panem, prohibiéndole la entrada a todos los Pepes y Marías del mundo).

Sinsajo es el libro más sangriento de todos. Sí, Susanne Collins es una sádica. Sí, me encanta. Se lo tuvo que pasar pipa matando personajes a diestro y siniestro...La Collins tuvo que ser psicópata en la otra vida, está claro.



Esto nada, que me puse a dibujar a
Katniss y me salió la comadreja. v_v"
(Y no, no he visto una comadreja en mi
puñetera vida).

Lo único que no me gustó fue que hubiera un triángulo amoroso, porque, no sé si os habíais dado cuenta, pero los ODIO. Estoy HARTA de triángulos amorosos, como Crepúsculo (perdón, debería haber puesto un ejemplo más digno). Cada vez que quieren darle un poco de vidilla a una historia, y que enganche a los cipotes adolescentes, ponen uno de esos. Está claro que la escritora cayó en la trampa comercial. Y es que con un argumento como éste, no sé qué pinta ahí un triángulo amoroso. Lo siento pero no lo entiendo. Hace que un personaje tan genial como Katniss parezca odioso y egoísta, saca lo peor de ella. Porque, ¿a vosotros no os han entrado ganas de cogerla, abofetearla y decirle que da igual a cuál elija déjamelos a mí cabrona, si no quiere a ninguno? Pues a mí sí. Me daba mucha rabia que hiciera sufrir al pobre Peeta (oh, Peeta). Ya sabéis cómo es Peeta, tan bueno, tan dulce, ¡moníiiiisimo de la muerte! (que raro suena esto último), así es normal que me enfade con Katniss. 

Sobre Gale no tengo nada que decir, porque está ausente la mayor parte sel tiempo, sólo en Sinsajo toma un poco más de protagonismo. 

 Además, no sé de dónde salen estos chicos, porque en la vida real, ningún chico sería tan comprensivo ni diría "bueno, no pasa nada, si no sabes a quién elegir tú, tómate tú tiempo, y puedes morrearte con los dos a la vez, no importa, yo te estaré esperando." ¿Dónde está el orgullo? ¿Y el amor propio? Para qué nos vamos a engañar, un chico normal diría "por ahí te pudras" y adiós muy buenas.

Y tampoco sé cómo Katniss puede tener a dos maromos detrás (ni siquiera es uno, son DOS). Porque, por lo que dice el libro, ella no se ha depilado en la vida y tiene que ser una mujer-oso, bigotuda y uniceja. Pero nosotros, sus fans, preferimos verla así:

No hagáis caso, sólo es una tontería. No os dejéis llevar por mis dudas existenciales.

Lo siento si he sido un poco dura, pero es que me da mucha rabia que un libro y un personaje tan bueno se vean estropeados (bueno, tampoco mucho, la verdad) por el puñetero triángulo amoroso.

Yo soy de las que adoran el final de los Juegos del Hambre. Es triste, pero tenía que acabar así. Además, ya estamos hartos de finales felices, que demonios.


L.Eleniak