Leyendo...Desayuno en Tiffany's

Me aburro. No tengo nada que hacer, estoy en mi casa muerta de calor, con sueño y en estado casi zombie. Como no tengo nada que decir, me aburro y he publicado poco últimamente (por motivos de mudanza y bla, bla, bla), os voy a contar mi vida y os voy a decir lo que estoy leyendo ahora.

Desayuno en Tiffany's   Holly Goligthly es, quizás, el más seductor personaje creado por este maestro de la seducción que fue Truman Capote. Atractiva sin ser guapa, tras rechazar una carrera de actriz en Hollywood Holly se convierte en una estrella del Nueva York más sofisticado; bebiendo cócteles y rompiendo corazones, parece ganarse la vida pidiendo suelto para sus expediciones al tocador en los restaurantes y clubes de moda, y vive rodeada de los tipos más disparatados, desde un mafioso que cumple condena y al que visita semanalmente, hasta un millonario caprichoso de afinidades nazis, pasando por un viejo barman secretamente enamorado de ella. Mezcla de picardía e inocencia, de astucia y autenticidad, Holly vive en la provisionalidad permanente, sin pasado, no queriendo pertenecer a nada ni a nadie, sintiéndose desterrada en todas partes pese al glamour que la rodea, y soñando siempre en ese paraíso que para ella es Tiffany's, la famosa joyería neoyorquina.

Libro del cual desconocía su existencia. La desconocía hasta que, un tiempo después de ver la película de Desayuno con diamantes, Cierto Pato me pasó esto:

Esto fue un FFFFUUUUUU enorme. Odio con toda mi alma ver la película antes de leer el libro en el que está basada. LO ODIO. Me da mucha rabia ver una peli sin saber que hay novela, y me pasa con frecuencia, parece que me ha mirado un troll. Sobre todo me molesta cuando la historia me acaba encantando, como esta.

En fin, que aunque que me detesto a mí misma por haber visto la versión cinematográfica primero, me he puesto con la historia de Holly Golightly (Golightly. Go-lightly. Go lightly *-*) en novela.  No tengo mucho que decir, porque lo acabo de empezar, sólo que Holly es amor y tiene incluso más desparpajo al hablar en el libro que en pantalla. Y está menos censurada también.

Es una novela muy cortita, por lo que la acabaré en nada, son 160 páginas en papel (creo) y 47 en PDF (que es como lo estoy leyendo yo, cosa que no me gusta mucho, aparte de porque me estoy quedando más ciega aún de lo que estoy, por mi filia obsesiva al papel: los libros en el ordenador me dan la impresión de que no tienen alma). 

Aparte de Desayuno en Tiffany's: el otro día me acabe Dime quién soy-de Julia Navarro-que aunque al principio no me convencía, al final me ha gustado un poquito más de lo que esperaba; sigo con Lestat el vampiro-el segundo de Crónicas Vampíricas-el cual es incluso más genialoso que el anterior de la saga; y esta mañana me he comprado Cómo entrenar a tu vikingo-de Cressida Cowell-que lo he acabado en horas (me gustan estos libros monosines, no sé por qué).

Y ya está. A dormir. Patogato.